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Cómo crear una vida laboral sana

Un estado dinámico que se expresa en la vida cotidiana a través del comportamiento y la interacción de manera tal que permite a los sujetos individuales y colectivos desplegar sus recursos emocionales, cognitivos y mentales para transitar por la vida cotidiana, para trabajar, para establecer relaciones significativas y para contribuir a la comunidad, es la definición de Salud Mental que nos llega desde el Ministerio de Salud y Protección Social.


La concienciación de la puesta en marcha de la promoción de entornos saludables y prevención en salud mental en las empresas, así como de intervenir en los factores de riesgo psicosocial, pueden reducir notablemente los efectos negativos en el clima organizacional, en los miembros que lo componen y en la productividad de la empresa.


Un trabajador que disfruta de una óptima salud mental, desarrollará sus capacidades para sentir, pensar y actuar de la manera más productiva ante los conflictos que puedan presentarse, influyendo directamente en sus emociones y en el bienestar general.


El estado psicológico y emocional de cada componente dentro de la organización, generara consecuencias y la funcionalidad en su puesto de trabajo, incrementando o reduciendo los factores de riesgo como pueden ser tener un accidente, absentismo laboral, o falta de motivación entre otras.


Los factores protectores en el trabajo van a ayudar a desarrollar una salud mental positiva, contribuyendo a la estabilidad y dotando de herramientas para resolver situaciones adversas.


La calidad de vida en el entorno laboral, depende tanto de la organización como del propio trabajador, es fundamental tener un equilibrio entre ambos para poder conseguir beneficios y sentimientos positivos de la labor que realiza y hacia la organización donde presta sus servicios.


El aspecto emocional, tiene un impacto directo sobre los resultados obtenidos, puesto que dependen en cierta parte de la percepción personal, del grado de bienestar y satisfacción del personal, entre los que podemos encontrar la actividad profesional que está realizando, las relaciones personales entre compañeros, la percepción de liderazgo o las expectativas de futuro generadas.


Por otro lado, existen otra serie de factores más objetivos relacionados con el nivel de calidad de vida laboral, destacando:

  • Medio ambiente físico en el que se desarrollan las funciones laborales, dentro de estos nos referimos al espacio físico, temperatura, luz, espacio personal…

  • Medio ambiente contractual, siendo la retribución percibida y la estabilidad laboral de los trabajadores

  • Medio ambiente tecnológico, son los dispositivos de los que el empleado dispone para realizar su trabajo

  • Medio ambiente productivo, siendo el volumen de trabajo que ha de realizarse teniendo en cuenta el tiempo del que dispone para ello.


El equilibrio y la salud mental de una persona, estará relacionado con la calidad de vida laboral que perciba tener, puesto que un buen clima laboral, propicia una sensación de satisfacción de los empleados en relación con su trabajo y se reduce en beneficios a nivel personal, organizacional y rentabilidad para la empresa.


Cree en ti mismo y serás imparable.


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